LOS SIERVOS DE MARÍA EN LA ARGENTINA

 

LOS SIERVOS DE MARÍA EN LA ARGENTINA

 


En el año 1914 llegaba a nuestro país, procedente de Italia el P Alejo M. Rattalino,
de la Provincia Piamontesa de la Orden de los Siervos de María con el objeto de
preparar una casa religiosa de la Orden en la Argentina.
Coincidió su estadía en este país con el estallido de la primera guerra mundial que lo
dejó solo y sin esperanzas de ser auxiliado por otros religiosos de la Orden, y lo obligó
a ejercer su ministerio primero en Díaz y después en Rufino como capellán del hospi-
tal hasta el año 1918. "
Terminada la guerra retomó la esperanza de concretar el objetivo original de su veni-
, da, y fue así entonces que el Obispo de Santa Fe, Mons. Juan Agustín Boneo, le confió
la Parroquia de San Antonio de Obligado, en el norte de la provincia, donde llegó el 8
de enero de 1918.
San Antonio de Obligado tuvo su origen el 22 de junio de 1884 cuando Fray Hermete
Costanzi llegó a fundar, por orden de sus superiores, la Misión de San Antonio de
Obligado estableciendo una reducción de indígenas mocovies.
El P Alejo Rattalino comenzó éntonces a desarrollar su labor pastoral en un amplio
territorio de más de diez mil kilómetros cuadrados, el que tenía como centro a San
Antonio de Obligado y abarcaba también Villa Ocampo, Villa Ana, Tartagal, Villa
Guillermina, Las Toscas, Florencia y otros núcleos urbanos menores.
Fueron dos años de trabajo intenso y solitario, superanúo toda clase de obstáculos,
hasta que, luego de haberlo solicitado a los superiores de la Provincia Piamontesa,
recibió un refuerzo para atender la amplia Parroquia a su cargo. En el año 1920 llegó el
P. Miguel M. Enrici y al año siguiente, en su visita a la zona, el Superior Provincial
P.Juan Ángel M. De Marchi, trajo a otros dos religiosos, el P. Celso M. Milanesio y el
Hno. Fray Bonifacio M. Amold. Asegurada de esta manera la atención espiritual, en ese
mismo año 1921 el Obispo de Santa Fe cedió a la Orden de los Sien,os de María la
Parroquia de San Antonio de Obligado.
En 1923 el P. Rattalino fue trasladado a la Misión del Acre y Purús, en Brasil,
sucediéndolo en el cargo de párroco y superior de la misión el P. Celso M. Milanesio.
En 1924 llegó desde Italia el P. León M. Botta para sumarse a la labor pastoral y para
que ésta fuera más efectiva se establecieron tres residencias: San Antonio de Obligado,
Villa Ocampo y Villa. Guillermina, con un sacerdote en cada una, el P. Celso M.
Milanesio en la primera, el P. Miguel M. Enrici en la segunda y el P. León M. Botta en

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A partir de allí fue muy intensa la labor desarrollada por los infatigables sacerdotes,
surgiendo bajo su consejo la Cofradía de los Siete Dolores de María Santísima, el
Apostolado de la Oración, la Acción Católica, entre otros, hasta que en 1930, habién-
dose ampliado el templo y la casa parroquial de Las Toscas, la sede parroquial se
trasladó hacia aquella localidad.
La tarea del P. Miguel Enrici en Villa Ocampo, el P. Celso Milanesio en San Antonio
de Obligado y ahora el P. León Botta en Las Toscas fue muy fructífera, la que fue con-
tinuada luego por otros sacerdotes hasta que, en 1937, la Orden de los Siervos de María
entregó la Parroquia de Villa Ocampo a la Arquidiócesis de Santa Fe, quedándose con
las de Las Toscas y Avellaneda, esta última recibida en el año 1929.

 

 

 

SIERVOS DE MARÍA

QUE ACTUARON EN AVELLANEDA


P. Celso M. Milanesio
P. Joaquín M. Pecchio
P. Miguel M. Enrici
P. León M. Botta
P. Jorge M. Cappello
P. Tarcisio M. Bozzo
P. Félix M. Maletto
P. Damián M. Spagnolo
P. Constantino M. Zarantonello
P. Carlos M. Berti
P. Alejandro M. Bello
P. Ricardo M. Roncato
P. Cristóbal M. Piubello
P. Augusto M. Incao
P. Germán (Lino) M. Godalli
P. Rogelio M. Snaider
P. Miguel M. Gaudiello
P. Tomás M. Sgualdino
P. Joaquín M. Bonaldo
P. Jerónimo M. Meneghini
P. Rafael M. Borotto
P. Benito M. Moresco
P. Agustín M. Poier
P. Antonio M. Picco
P. Jorge M. Trivellín
P. Roberto M. Braida
P. Reinaldo M. Chies
P. Angélico M. Nicolodi
P. Natale M. Antonello
P. Marcelo M. Frassón
P. Faustino M. Arce
P. Adolfo M. Carrizo
Hno. Bonifacio M. Amold
Hno. Vittorio M. Cordero
Hno. Luis M. Salvador
Hno. José M. Gallo
Hno. Buenaventura M. Signori
Hno. Lorenzo M. Santinón
Hno. Antonino M. Balasso
Hno. Alberto M. Schettín
Hno. Pierino M. Capelazzo
Hno. Alfredo M. Torres
Hno. Rogelio M. Scortegagna
Hno. Adolfo M. Acosta